viernes, 2 de mayo de 2014

Cistus albidus (Jara blanca, estepa blanca)

Jara blanca (Cistus albidus), en Las Cabreras, junto al embalse de San Juán, en Guadarrama. Abundante por esta zona, es más escasa sin embargo en el resto de Guadarrama, donde dominan la jara pringosa (cistus ladanifer) y la estepa (cistus laurifolius)

Fruto en forma de cápsula, abierta en este caso, típica de las cistaceas.

Características hojas afieltrádas de color blanco-grisáceo.
Flores rosáces bisexuales con múltiples estambres.

A principios de mayo en la garganta del rio Guadalix, en el piedemonte de Guadarrama.
 
Familia: Cistáceas.

Origen: Africa del Norte, Sudoeste de Europa. Hábitat: especie autóctona mediterránea. Crece desde el nivel del mar hasta cerca de los 1.000 m. Forma parte de los matorrales y garrigas que sustituyen a los encinares degradados. Etimología: Cistus era el nombre de la jara en latín clásico. El epíteto específico albidus significa blanquecino en latín y se refiere al aspecto cromático de sus hojas. El nombre vulgar de jara viene del árabe xara que significa matorral. Arbusto perenifolio. Altura: 1-1,5 m. Hojas son de color gris blanquecino ovaladas y ásperas, las flores son rosadas o moradas y de escasa duración, los estambres son amarillos. Su follaje es aromático. Florece entre primavera y verano y prefiere terrenos calcáreos pero no soporta una humedad en exceso. Sus flores, de color rosa pálido, recuerdan a las rosas.

 Las hojas han sido utilizadas por los árabes de Argelia como té, resultando muy digestivo tras comidas pesadas. En el Levante español, durante épocas de escasez, se han llegado a utilizar las hojas como sucedáneo del tabaco.

 Soporta heladas no muy fuertes. Suelo arenoso, permeable y más bien pobre. Prefiere los suelos calizos pero vive bien en los neutros y en los poco ácidos.